Capitulo anterior:
Pasaron un par de días, y Eugenia continuaba
con mareos y con los vómitos matutinos. Cada día más Peter se hacia la idea de
que estaba embarazada, opinión totalmente opuesta a la de la muchacha. La
prueba había dado negativa y eso era un hecho. Estaba desayunando cuando
llamaron a su móvil.
-¿Diga?
-Eugenia, ¿eres tú?
-Si, ¿quién es?
-Soy Maribel, tu médica, ¿podrías venirte hoy
a las doce a visitarme? Tus análisis han llegado y hay algo que tengo que
contarte.
-¿En serio? Si, claro, a las doce estoy ahí,
sin problemas. Pero…lo que me tiene que decir… ¿es muy grave?
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Eugenia bajo del taxi y entró en el médico. Había tenido suerte, no
quería que Peter la acompañase, y él en ese día tenía que entrar a trabajar más
temprano. Eugenia tenía miedo de que fuese algo malo y prefería primero
enfrentarlo sola y después contárselo a él en el caso de que así fuese. Respiró hondo y fue a recepción para que
avisasen a su médica de cabecera de que ya había llegado. Tomó asiento y
esperó. Había llegado quince minutos antes de las ganas y necesidad que tenía de
saber qué era lo que le pasaba. Volvió a respirar hondo tratando de
tranquilizarse cuando una mujer vestida de bata blanca se posó delante suya.
Eugenia miró hacia arriba para ver de quién se trataba y en efecto, era su
médica de cabecera que le dedicó una amplia sonrisa y le saludó:
-Buenos días, Eugenia.
Ambas se conocían de hacia tiempo. Ella había sido su médica de
cabecera desde siempre, excepto esa etapa en que Eugenia residió en Barcelona. Había
mucha complicidad entre las dos mujeres y se trataban de tú a tú.
-¡Cuánto tiempo sin verte!-exclamó la mujer.
-Si, mucho-dijo Eugenia levantándose nerviosa.
-Bueno, pasemos a mi consulta-le dedicó otra sonrisa.
Una vez dentro y las dos mujeres sentadas, frente a frente, la médica
empezó a hablar:
-Bueno, veo que estas un poco nerviosa.
-Si, estoy bastante nerviosa. Quiero… bueno, necesito, saber qué dicen
esos análisis.
-Está bien, entonces, no te la hago más difícil. Verás, Eugenia…
El corazón de la muchacha iba a mil por horas y sentía que entre cada
palabra que decía aquella mujer había intervalos de silencio de minuto y medio.
Se le hacía eterno.
-Euge, felicitaciones, estas embarazada-dijo la mujer con una sonrisa
de oreja a oreja.
-¿Qué?-preguntó la muchacha llevándose la mano a la boca.-N…no puede
ser. Yo…yo hace cuatro o cinco días, no sé, me hice un test de embarazo y…dio
negativo, salió una raya, y… eso es…negativo-Eugenia se había puesto más
nerviosa aún. No entendía absolutamente nada.
-Eugenia, tranquilízate-le dijo la médica sin borrar la sonrisa de su
rostro.-Verás, eso tiene una explicación. Los test de embarazos siempre tienen
un pequeño margen de error y a dos de cada cien personas les falla-hizo una
pausa.- Por eso, te recomiendo para la próxima vez que te hagas dos test para estar cien por cien segura ¿de acuerdo?
-Si, si. Me haré tres si hace falta. Pero no sabe la alegría que me
acabas de dar.
-Vaya, por lo que veo es un embarazo deseado.
-Si, muy, muy deseado. Más que deseado. Te juro que no me lo creo.
-Pues está todo explicado aquí-dijo entregándole un sobre.
-Muchas gracias-hizo una pausa.-Y una pregunta, ¿de cuánto estoy?
-De mes y medio-le contestó sonriendo.-En los análisis que vienen
dentro del sobre, te lo explica todo. Pero ahora lo que tenemos que hacer es
marca una cita para tu primera ecografía.
Una vez aclarado todo y una vez que la médica le dio todos los consejos,
Eugenia se dispuso a marcharse. Salió de la consulta con una sonrisa de oreja a
oreja. No podía creer que tras haber sufrido tanto pensando que podría ser algo
peor, al final le confirmaran lo que más estaba deseando. Estar embarazada. Se
llevó la mano a la barriga y recordó la ilusión que le hacia a Peter tener un
hijo con ella. Estaba apunto de salir del médico cuando una voz masculina y
familiar pronunció su nombre a sus espaldas. Se dio la vuelta y se asombró
verlo allí.
-Nicolás-vocalizó frustrada.
-Vaya, ¡qué casualidad verte aquí!
-Si, bastante casualidad, pero si me disculpas…
-No, espera. Por favor, Eugenia. Hablemos. Creo que ayer te demostré que
no voy con malas intenciones.
-Y creo que yo ayer te demostré que no quería hablar contigo, así que…
-Eugenia-una voz femenina la llamó.-Menos mal que aún no te has
ido-dijo la médica acercándose a ellos.-Se me ha olvidado decirte, aunque creo
que ya lo sabrás-Eugenia empezó a negar con la cabeza tratando de que la médica
se callase pero no fue posible.-Ahora no se te puede pasar por la cabeza hacer
dieta porque ahora tienes que comer por dos-Nicolás se asombró ante tal
declaración.-Pero tampoco vale abusar porque eso también es malo. Así que por
favor estate muy pendiente porque estos primeros meses son críticos y lo sabes
¿verdad?
-Si, no se preocupe-le sonrió.
-Entonces todo aclarado. Nos vemos el 12 de junio, que no se te olvide.
Es muy importante esta primera ecografía-le sonrió.-Bueno,-miró a Nicolás unos
segundos-Voy a seguir con mi trabajo y perdón por interrumpir la conversación.
-No pasa nada-dijo Eugenia sin perder la sonrisa a pesar de la metedura
de pata de su médica.-Adiós y gracias por todo.
Nicolás espero a que la mujer se alejase para preguntarle muy
asombrado:
-¿Estás embarazada?
-Nico, perdón por ser tan antipática pero no…
-Lo sé, lo sé. No me incumbe. Perdóname. Lo que pasa es que me ha
asombrado la noticia-le sonrió.- Pero bueno, felicidades.
-Gracias, y ahora si, me marcho porque sino voy a llegar tarde al
trabajo. Adiós, Nico.
-Adiós, Eugenia.
Él esperó a perder de vista a Eugenia para coger su móvil y buscar en
su agenda el nombre de ‘Julieta’. Una vez encontrado, pulsó el botón verde.
-¿Diga?
-Julieta, ¿tienes las fotos?
-No, aún no he podido revelarlas ¿por qué?
-No lo hagas. Tráeme la tarjeta de la cámara a casa, necesito hacerles
unos retoques a las fotos.
-¿Retoques? ¿Para qué?
-Acabo de enterarme de algo que va a hacer que nuestro plan salga a la
perfección y por fin consiga lo que tanto ansío.
-¿Tanto ansías? Dios, Nicolás, esta chica no se enamorara de ti de la
noche a la mañana. Estoy completamente segura de que hay miles de chicas que…
-Julieta-la interrumpió.-No te pago para que me des tu opinión, sino
para que trabajes. Así que nos vemos en media hora en mi casa.
Eugenia estaba montada en un taxi rumbo al bar de Gastón. En ese día
empezaba más tarde por lo que había podido ir tranquila al médico sin tener que
pedirle permiso para llegar más tarde y sin tener que dar explicaciones. La
emoción, a pesar de que Nicolás fuese la primera persona en enterarse de su
estado, le invadía el cuerpo y estaba deseando contárselo a Peter. Quería
hacerlo pero en persona, así que no podría decirle nada a nadie hasta esa
noche. Para saber con exactitud cuando sería, decidió llamarlo.
-¡Mi amor!-exclamó ella al oír su voz.
-Hola. Vaya, ¡qué sorpresa! ¿Y esta llamada?
-No sé, me apetecía escuchar tu voz y… decidí llamarte.
-Vaya hoy estamos romántica ¿no?
-No sabes cuánto-dijo echando la cabeza hacia atrás en el asiento.- ¿A
qué hora llegas de trabajar?
-Mmm… supongo que a las once, once y media porque hoy tengo mucho
trabajo. ¿Por qué? ¿Quieres que te vaya a recoger al bar?
-No, no hace falta. A esa hora ya estaré en casa, hoy es miércoles, asi
que salgo antes.
-Bueno, entonces nos vemos esta noche.
-Si, y digamos que será una gran noche.
-¿Y eso por qué?
-Digamos que tengo algo que contarte.
-¿Ah, si? ¿Y de qué se trata?
-Mmm… no sé, ya lo sabrás esta noche. Adiós, te quiero.
-Yo también te quiero, mi amor.
Nicolás estaba deambulando por su apartamento de un lado a otro
mientras esperaba a que llegase Julieta. Estaba nervioso y tenía que intentar
que su plan funcionase si o si. No podía permitir perder a Eugenia, aunque ya
la tenía completamente perdida. En ese momento, sonó el timbre. Era Julieta.
-Al fin llegas.
-Perdón me he retrasado un poco, el vídeo ha tardado mucho en grabarse
en el CD-dijo enseñándole un CD.
-Bueno, dame las fotos.
-Voy, voy. Tranquilo. No hay prisa.
-Claro que la hay. Hoy mismo Peter tiene que ver estas fotos.
Continuará...
[Bueno, bueno, hoy he subido dos capitulos porque para la semana que viene no voy a poder subir. Así que os dejo dos como recompensa jajajajaja y por si mañana se me olvida subir, os quería dejar con un 'buen' sabor de boca :P & nada, que repito: SE VIENE MOVIDAS! xD Besos & gracias por comentar]
Aiiiiii LPM!!!!!! Es hermosooooooooooooo *ww*
ResponderEliminarAl fin, el bebeeeeeeeeeeeeeeeeee :DDDD
Feliiiiiiiiz *wwww*
Bueno che, ese Nicolas que tiene que arruinar todo, porqué seguro se inventara que hizo cositas con Euge y que Peter piensa que el bebe no es suyo!!! ç____ç lloro, ah!!!! No quierooo que pasa algooo maloooo :((( .. Y quiero otro, ah!!! No resisto una semana sin la nove, ya nos dejaste todo este tiempo jajajjaj Bueno dale, deja el otro cap cuando podes :DD Besoss geniaa