miércoles, 12 de septiembre de 2012

JF2.Capitulo 32: Las cosas cambian

Capitulo anterior:

-¿Y qué has traído?
-La cena-dejó las bolsas sobre la encimera y se dio la vuelta para darle un beso al muchacho.
-¿La cena?-preguntó nada más separar sus labios de los de ella.- ¿Tan temprano?
-¿Temprano? Peter es cerca de las diez de la noche.
-¿En serio?-preguntó aturdido.-He dormido más de lo que pensaba.
Ella sonrió y empezó a sacar las cosas de dentro de las bolsas con ayuda de Peter.
-Bueno, ¿y Eugenia?-preguntó Luna con curiosidad.
-No sé, supongo que seguirá en la casa de Agustín-suspiró, no le hacia ninguna gracia esa idea.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
El tiempo transcurrió y la cotidiana vida de Peter fue cambiando. En un principio, el muchacho fue perdiendo las ganas de querer salir todas las noches para volver a casa con alguna chica, así que solo se limitaba a estar con Luna hasta que llegó un día…
Era de noche y Luna y Peter como la mayoría de las noches, salían, bebían un poco de alcohol e iban a casa de alguno de los dos. Tras eso, se divertían con su particular forma de divertirse y pasarlo bien por las noches. Peter llevaba todo el día con la cabeza en otro lado, o mejor dicho, otra persona. Aquella misma mañana se había cruzado con Eugenia en la puerta de la habitación de la muchacha. Ella a penas se cubría con las sábanas de su cama, lo que dejo paso libre a la imaginación de Peter para suponerse y darse cuenta de lo que había pasado la noche anterior con Agustín que dormía plácidamente sobre la cama. Eso le molestaba, odiaba darse cuenta de lo estúpido que había sido no queriendo admitir antes de que todavía sentía cosas por Eugenia. Eso había hecho que la perdiese, o más bien, que ni siquiera la tuviese. Le dolía mucho su estupidez y estaba a poco de convencerse de contarle a Eugenia que él no le había metido los cuernos, años antes, pero ¿de qué serviría eso? Él no era quién como para frustrar la felicidad de su amigo por la suya, así que tendría que aceptar que en una batalla donde no había luchado por pura tozudez, había perdido. Así que estaba decidido a cambiar y a intentar quitarse a Eugenia de la cabeza, fuera como fuese. Había probado estando cada día con una mujer distinta y no había funcionado, así que ahora tocaba enamorarse y lo estaba intentando. Intentaba enamorarse de Luna, pero no quería forzarse a sí mismo enamorarse de alguien a quien veía como una simple amiga. Eso le llevaba rondando la cabeza toda la noche, lo que produjo que cometiera el error.
Peter y Luna acababan de divertirse a su manera, aún tenían la respiración agitada. Era la segunda vez que lo hacían aquella noche, a pesar de que él se encontraba disperso en sus pensamientos. Luna tenía la cabeza apoyada en el pecho de Peter mientras intentaba recuperar el normal ritmo de su respiración.
-Me encantas, Bedoya-dijo Luna con una gran sonrisa dibujada en el rostro.
-Y tú a mi…Eugenia-comentó sin darse cuenta.
-¿Cómo me has llamado?-preguntó Luna levantando la cabeza y mirándole fijamente enfadada.
Peter recapacitó en lo que había dicho y se llevó las manos a la cabeza. Sin darse cuenta la había llamado de otra forma y no con un nombre cualquiera, sino de la chica que esos días lo estaba volviendo loco de celos por estar con su mejor amigo.
-Perdón-se apresuró a disculparse.-N…no sé dónde tenía la cabeza.
-Bedoya, si intentas arreglarlo… vas mal-comentó Luna levantándose de la cama y buscando su ropa.
-Espera, espera. ¿A dónde vas?
-A mi casa, ¿no pretenderás que me quede después de que me hayas llamado…? ¿No podías haberme dicho otro nombre? ¿Tenía que ser… Eugenia justamente?- preguntaba mientras se vestía.
-En serio que lo siento, Luna. No he pensado en lo que he dicho y sin querer te he llamado así. Te juro que ha sido sin querer-hizo una pausa.-El problema es que la veo todos los días a casi todas horas y bueno, estoy con su nombre casi todo el tiempo en la boca.
-Bedoya, no inventes escusas. Se nota que te gusta, que estas enamorado de ella y yo no quiero ser la tercera en discordia o en ese caso estoy siendo el segundo plato.
-No, no. Tú no eres nada de eso. Yo… yo no siento nada por ella, de verdad.
-Bedoya, no mientas. Tú, yo y seguramente ella, sabemos que te gusta… ¿a qué otra mujer de todas con las que estás has tratado como la tratas a ella?
-A ninguna pero porque Eugenia es una amiga, solo una amiga.
-Una amiga y una ex…. Y donde hubo fuego…cenizas quedan-lo miró.-Además, ¿en serio crees que me hace gracia que me hayas llamado con el nombre de otra chica?-soltó un resoplido.-Dices que ha sido porque tenías la cabeza en otro lado, claro, estarías pensando en ella mientras estabas conmigo-Luna movía la cabeza de una lado a otro.-Me voy, adiós, Bedoya-se despidió mientras abría la puerta de la habitación.
Peter se apresuró a salir de debajo de las sábanas y a ponerse el bóxer para intentar alcanzarla y retenerla. Salió corriendo del cuarto y consiguió agarrarla en la entrada.
-Luna, en serio, lo siento. Haré lo que sea para que me perdones…-la miraba entristecido, se sentía mal haciéndole daño.
-Peter, no te preocupes, no pasa nada pero no me pidas que me quede después de que…-Luna se quedó callada porque vio a Eugenia bajar las escaleras.-En fin, adiós-le sonrió y le dio un beso en la mejilla.
Peter cerró la puerta tras no ver más a Luna, y empezó a golpearse la cabeza contra el marco.
-¡Ey! ¡Ey! Loco-dijo Eugenia acercándose a él.- ¿Qué te pasa?
-Me pasa que estoy frustrado porque las cosas últimamente no salen como me gustaría que saliesen.
-¿Y eso?-preguntó mirándole a los ojos con una sonrisa, intentaba transmitirle confianza.
-Nada, déjalo-le sonrió.
-Bueno, cuando te apetezca hablar… sabes donde duermo-bromeó y lo abrazó.
-Gracias-le acaricio la mejilla.-En fin, Euge, me voy a dormir-bostezó.-Me muero de sueño.
-Vale, yo me voy a tomar un vaso de leche y en breves también me iré a la cama.
-Pues, ¡qué duermas bien!-le dio un beso en la mejilla.-Nos vemos mañana.

A partir de ese día, las cosas cambiaron. Peter tras varios intentos consiguió hablar con Luna y le pidió perdón otra vez y le admitió sus sentimientos hacia Eugenia. Necesitaba arreglar las cosas con la chica que había sido su amiga especial durante meses, no quería acabar su relación con ella de esa manera. Tras charlar y conseguir el perdón de la muchacha Peter y Luna habían quedado como simples amigos. Eugenia cada día estaba más enamorada de Agustín, y estaba aprendiendo o intentando olvidar de Peter. Sabía que con el tiempo Agustín conseguiría ocupar el lugar que hasta aquel entonces ocupaba Peter en su corazón. En cuanto a su prima, volvió a hablar con ella y Rocío le explicó porque el día que le estaba pasando una foto de su novio, se fue repentinamente; el hermano le había apagado el ordenador. Llevaba tiempo detrás de la muchacha observando la conversación que mantenía con Eugenia y por otro lado con ese chico del que estaba enamorada; y no le gustaba ni un pelo que su hermana pequeña, o sea Rocío, estuviese ligando con alguien desconocido por lo que le prohibió que volviese a hablar con él quitándole internet. Rocío no podía hacer nada, ya que si se lo contaba a sus padres, el hermano les explicaría el motivo de por qué le quitó internet, así que lo único que podía hacer era hablar por teléfono con el chico que la estaba volviendo loca sin que su hermano mayor se enterase.
Después de muchas búsquedas, Candela por fin había encontrado trabajo como recepcionista de un hotel. Le quedaba un poco lejos de casa por lo que normalmente Luca la llevaba y a la hora de regresar, como salía una hora antes de la que solía salir su novio volvía en autobús o cogía un taxi. En cuanto a su hermano, Nicolás, lo había visto un par de veces desde que se había enterado que había regresado. Habían pasado toda una tarde juntos, charlando y contando todo lo que habían hecho ese tiempo en que no se habían visto y por los temas que estaban tocando, Eugenia apareció en la conversación. Nicolás se alegró al escuchar que ella había vuelto y vivía por allí cerca. Quería volver a verla, necesitaba volver a verla. Le sugirió a su hermana ir en aquel momento a visitarla pero la muchacha se tuvo que negar ya que Eugenia estaba trabajando y no estaba en su casa. 

Continuará...

[Holita :3 Gracias x los coments. Quería decir que este capitulo era un cap. de transición xD Donde las cosas va cambiando x) Bueno, besitos&espero que os haya gustado^^]

1 comentario:

  1. POR FIN!!!! peter se dio cuenta que ama a euge... quiero momento eugeter ya!

    ResponderEliminar