JF2. Capitulo 11: Mi, tu, su...casa

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A la mañana siguiente, Eugenia se había despertado con dolor de cabeza, necesitaba urgentemente tomar café. Se levantó de la cama y miró a Agustín, que seguía dormido. Se puso la ropa interior y bajó a la cocina a preparar café.

Peter había llegado a su casa, abrió la puerta y vio ropa tirada en el suelo de la entrada. Entró, cerró la puerta y fue en aquel momento en que recordó que le había prestado la casa a Agustín. Sintió la necesidad de tomar café para despejarse y fue hacia la cocina…

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Peter sintió la necesidad de tomar café para despejarse y fue hacia la cocina, cuando de pronto Agustín se interpuso en su camino, preguntándole en voz baja:

-Pero, ¿qué haces aquí?

-Es mi casa-contestó Peter sin entender bien la pregunta.

-Si, pero…ahora te explico-dijo Agustín empujando a su amigo dentro del armario que había debajo de las escaleras.

-¡Agus!-exclamó Eugenia.-Pensaba subir a preguntarte si querías café.-le sonrió.

-Oh, no gracias. Ahora mismo no me apetece.

Peter, desde dentro del armario, escuchó la voz de la muchacha y le sonó realmente familiar. Intentó abrir un poco la puerta para verle la cara a la chica, pero Agustín se dio cuenta y cerró rápidamente la puerta, antes de que él pudiese ver nada.

-Euge, ¿por qué no te tomas el café tranquilamente en la cocina?-le sugirió Agustín un poco nervioso.

-Bueno, está bien-le sonrió.

La muchacha estaba por irse, cuando retrocedió y se acordó de que tenía un compromiso esa mañana.

-Mierda, ¿qué hora es?

-No sé, deben de ser cerca de las nueve.

-Joder, me tengo que ir.

-¿Por qué?-preguntó Agustín.

-Porque…porque tengo que entrar a trabajar a las diez-mintió.

-¿Tan temprano?

-Si, bueno, es que me han cambiado el horario.

Eugenia cogió su ropa tirada en la entrada y se fue a vestir mientras intentaba terminar de tomarse el café.  Peter estaba por salir del armario, cuando Agustín volvió a empujarlo al interior, al ver que Eugenia había terminado de vestirse.

-Adiós, beso, beso-dijo la muchacha, dándole un beso a su ‘novio’ y yéndose.-Luego te llamo.

Eugenia salió a toda prisa, se había acordado que a las diez el amigo de Agustín que le estaba preparando una fiesta sorpresa pasaría a buscarla y aún tenía que ducharse, arreglarse, pintarse y no le iba a dar tiempo.

Agustín viendo que ya se había ido, abrió la puerta del armario y vio a Peter con cara de enfadado.

-¿Se puede saber que te pasa?-preguntó el muchacho de ojos marrones con tono de verde, yendo hacia la cocina.

-Lo siento, en serio. Todo tiene una explicación.

-Te escucho-dijo sirviéndose una taza de café que había hecho la ‘novia’ de su amigo.

-Verás, anoche cuando llegamos aquí, a tu casa, no se me ocurrió decirle otra cosa que me había mudado a esta casa y claro, si ahora te llega a ver aquí, no sabría que decirle.

-Pues le podrías haber dicho que soy tu colega que vive contigo o no sé; cualquier tontería-hizo una pausa.-Pero ahora que lo pienso, ¿qué pasará cuando ella quiera volver a ir a tu casa y sepa que sigues viviendo en el mismo sitio de antes? Se enterará de que le has mentido. Agus, muy mal. La base de una relación es la sinceridad-comentó Peter tratando de no reírse.

-La verdad que ayer no había pensado en eso cuando le dije que era mi casa.

-Mal, muy mal, Agus-Peter empezó a reírse.-Bueno, oye, me voy a duchar porque me tengo que ir en breve. ¿Tú que piensas hacer?

-No sé, supongo que me iré a mi casa.

-Bueno, como tú quieras-le sonrió y subió a su habitación a bañarse.

Eugenia llegó a su departamento y de inmediato fue a su cuarto a por la toalla y luego al baño. Intentó abrir la puerta pero Patrick se estaba duchando.

-Patrick, necesito el baño, es urgente. En menos de una hora van a venir a buscarme-gritó golpeando la puerta.

-Ya salgo, ya salgo.

El muchacho terminó de ducharse lo más rápido que pudo y salió del baño con una toalla enrollada en la cintura.

-¿Se puede saber quién te viene a buscar?-preguntó abriendo la puerta.

-Luego te lo explico.

Eugenia entró y cerró la puerta. Se quitó rápidamente la ropa y se metió en la ducha. A los minutos, Patrick entró en el baño, ya que Eugenia se había olvidado de echar el pestillo.

-Cuéntame, ya, quién te viene a buscar.

Eugenia se asustó al escuchar la voz del muchacho y gracias a la cortina ella pudo seguir bañándose mientras hablaba con Patrick.

-Un amigo de Agus va a organizarle una fiesta de cumpleaños y yo lo voy a ayudar.

-Ah, vaya-hizo una pausa.-Ahora dime, ¿dónde has dormido esta noche? ¿Con quién? Y ¿qué habéis hecho?

-A ver, he dormido en la casa de Agustín, con él y… ¿hace falta que te conteste a la última pregunta?

-Si, con todos los detalles.

Eugenia se rió.

-No te lo voy a contar.

-Bueno, está bien, solo contéstame a una cosa; ¿es bueno?

-¿Qué?

-Que si es bueno en la cama.

-¡Patrick!-exclamó Eugenia.

-Está bien, hoy eres mujer de pocas palabras, por lo que veo.

-Exacto-hizo una pausa.-Oye, ¿me harías un favor?

-Si, dime.

-¿Me escogerías alguna ropa para ponerme mientras yo me baño?

-Si por supuesto.

Patrick se fue al cuarto de Eugenia y buscó alguna ropa. Tras elegirla, volvió al baño y dijo:

-Bueno, Euge, tienes la ropa encima de tu cama, yo me voy ya al curro. Ya nos vemos esta noche si es que hoy duermes en casa.

-Tranquilo que si-se rió.-Muchas gracias, besos, te quiero.

-Y yo.

-¡Ah, espera! Una cosa, ¿qué hora es?

-Las nueve y media-contestó Patrick.

-Gracias.

-De nada, adiós.

Patrick se fue, cerrando la puerta del baño al salir. Eugenia más tranquila sabiendo que todavía tenía media hora, se bañó a gusto.

Peter ya había llegado al edificio donde vivía la amiga de Agustín. Había salido antes de su casa porque tenía que buscar la dirección y pensaba que tardaría en encontrarla pero no fue así, estaba a minutos de su casa. El muchacho estacionó el coche, y entró en el edificio gracias a que una señora que vivía allí estaba saliendo. Pulsó el botón del ascensor y lo esperó. Al entrar, pulsó el botón de la tercera planta y esperó a que se cerrasen las puertas para mirarse en el espejo. Se arregló la camisa, se quitó las gafas de sol y se pasó la mano por el pelo mojado. Al llegar a la planta, salió del ascensor, buscó la puerta que era y llamó al timbre. Nadie abrió. Volvió a llamar un par de veces más.

Eugenia estaba cantando mientras se duchaba y no oía nada de lo que estaba pasando fuera.

Peter estaba por irse cuando decidió llamar una vez más. En ese momento, Eugenia acababa de cerrar el grifo y había dejado de cantar, así que escuchó el timbre.

-¡Mierda! El amigo de Agustín.

Salió del baño con una toalla enrollada al cuerpo y fue a su cuarto a vestirse a toda velocidad. Cuando estaba por quitarse la toalla, vio que Patrick se había olvidado la cartera y las llaves de casa.

-Oh, es Patrick, se ha dejado eso-se dijo a sí misma muy convencida.

La muchacha se agarró bien la toalla al cuerpo y fue a abrir la puerta.

Continuará...

[Bueeno, bueno, os comento que falta poquito para el reencuentro y que ya no hago sufrir más x) ! & bueh, quería desearle feliz cumpleaños al bombonaaachooo de Peter Lanzani y a Rochi Igarzabal. Que se hacen mayores :')! xDD Bsitos & espero qe os esté gustando. Chaito^^]